Histéresis: Sin Miedo al éxito
Junior Hernández Castro 
Saldando una deuda de casi un mes, vengo a decirles lo siguiente: abran Telegram, escriban en el buscador «Histeresis_oficial» y, sin pensarlo dos veces, descarguen el EP Sin Miedo . ¿De qué va? Digamos que rock progresivo, aunque etiquetar a Histéresis en esa única categoría es algo más que cuestionable ahora mismo.
El estreno fonográfico de este joven grupo habanero contiene cuatro temas que, aunque no son ajenos a su sencillo debut, «Nota Informativa», se desmarcan en cuanto composición musical, diversidad sonora y profundidad de los textos..
“Sin Miedo», una canción romántica de aires poperos, bien podría ser la apertura de una serie juvenil, con un estribillo fácil de corear y un trabajo nada despreciable en guitarra. Mayor dureza se muestra en «Viral», una pista donde la voz de Denis —con un timbre que odias o amas— suena más compacta con los riffs guitarreros y los teclados acompañantes.
Una atmósfera similar, pero en compases asimétricos, llega con «Alas de Inocencia», suerte de testimonio sonoro de la música que está dispuesta a defender Histéresis a toda costa, sin importar las presiones externas. Más calmada y con aires de balada llega «El Caminante y el Gran Tesoro», un tema de superación que funciona como cierre del EP y en donde el piano se muestra entre los instrumentos protagonistas, no opacando la interpretación vocal, sino, más bien, redondeándola con aires de melancolía.
Tengo una insatisfacción con Sin Miedo y radica en el acabado final. Histéresis que fue merecedora de una beca de la Asociación Hermanos Saíz, trabajó este fonograma en estudios estatales, que una vez más, muestran su desventaja con respecto a los productores independientes en materia de rock y metal. Ello no quiere decir que el EP suene mal, pero detalles como el sonido algo artificial de la batería o el bajo volumen de los teclados en ciertos puntos, constituyen aspectos que alguien con “fogueo rockero” hubiera manejado mejor, de asumir el proyecto desde el inicio.
Más allá de ese “pero”, Histéresis muestra un lado hasta ahora desconocido en su obra fonográfica: trasciende lo meramente progresivo e incorpora sonoridades del heavy, el hard rock, el pop y hasta algún atisbo de canción cubana contemporánea. ¿Que es una obra perfectible? Por supuesto. Pero aquellos que vieron en la banda un Dream Theater 2.0, deberán pensarlo dos veces antes de repetir esa idea. Seguro estoy, por lo que han mostrado hasta ahora, que los Histéresis tienen mucho por crecer y por dar todavía. Ojalá nos sorprendan pronto, y que esa sorpresa, sea para bien.
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