
A Chuck, donde quiera que estés
Chuck Schuldiner pasó gran parte de su carrera artística tratando de hacerle entender al mundo que la vida real era más brutal que cualquiera de las canciones de su banda. Death había dado incio a una forma diferente de hacer música, y cuando eres pionero en algo, atraes las miradas sobre tu trabajo. Lo novedoso siempre viene acompañado de incomprensión y es algo con lo que obligatoriamente hay que lidiar.
La negación de la propia vida como visión existencial no sólo puede ser un tema para una canción sino que también representa una forma de entender lo hostil que es la mortalidad. Somos seres finitos y debemos luchar, desde el nacimiento, con la idea de que algún día dejaremos de respirar. Aceptar la muerte no es algo que esté al alcance de todas las personas.
Death es el estandarte de quienes lo han comprendido. Su arte no es para todo tipo de público. Hay una distancia muy grande, casi tan abismal como la mismísima muerte, que separa a los adeptos de la música extrema del resto de la humanidad