por Imhotep, La momia
Esta noche me voy a referir al EP The Tragedy of Túrin Turambar, de Helgrind, que sigue el camino de su anterior CD, Return to the Motherland. Fue grabado en julio en los Deepblast Studios (La Habana) y lanzado a la marea subterránea de forma digital por la bisoña disquera británica Black Spark Records, hace solo unos días, el 29 de noviembre.
El primer tema, homónimo, comienza con una pequeña introducción acústica y un breve discurso de corte épico que nos ubica en La Tierra Media, ante el hijo de Húrin y Morwen, llamado Túrin, según el legendarium ficticio del escritor británico J. R. R. Tolkien.
La letra cuenta la historia del héroe, quien después de matar al dragón Glaurung, descubre que su esposa, encinta, es en realidad su hermana Nienor. Ambos personajes se suicidan, dándole a la narración la hermosura y pesadumbre de los finales de la Tragedia Griega; aunque Tolkien me reveló una vez, hace mucho tiempo, que su inspiración para crear el personaje de Túrin provino del Kalevala (libro del folclor finlandés) y no de Edipo, personaje mítico de la antigua Grecia.
Les hago este comentario porque si bien es cierto que la canción gusta por sí sola, por su estructura, solo de guitarra, los diferentes recursos vocales del cantante y el buen sonido de la grabación… la historia que cuenta es primordial, y está tan bien acompañada por la música que no pude menos que erizarme al escuchar el coro “Turin Turambar, Dagnir Glaurunga”, o sea, “Túrin Amo del Destino, Ruina de Glaurung”.
El segundo tema, “Theodish Belief”, y el tercero, “A Pagan Storm”, son covers a Forefather y a Wolfchant respectivamente y no se diferencian mucho de “The Tragedy of Túrin Turambar” en cuanto a estilo, color y sentimiento.
Por último, la cuarta canción es extraída de un concierto en vivo y figura entre las mejores de su anterior repertorio. Se trata de la “Time To Conquer”, solo que, me cabe la duda… si fue interpretada allá en La Habana (como dice el cover interior), ¿por qué el vocalista se dirige al público en inglés para exhortarlo a repetir el coro? ¿Quizás la audiencia era mayoritariamente extranjera…? Aunque… algún nacional estuvo presente, porque al final, se despide con un “gracias” en perfecto cubano.
En cuanto a la parte gráfica, la portada del EP utiliza una idea recurrente, pues covers con cascos antiguos hay decenas. No obstante, en este caso no se trata de cualquiera, sino de “El Yelmo Terrible” (otro de los sobrenombres de Túrin), y por eso lo considero un acierto que no pasa desapercibido a los conocedores del tema y queda grabado en la memoria visual del escucha.
A grandes rasgos, estamos hablando de un trabajo de metal underground de excelente factura, y que me hace deducir, entre otras cosas, que Helgrind finalmente ha encontrado su verdadero camino en los campos de batalla contra la Cristiandad. Los vikingos fueron los paganos más famosos de Europa; Helgrind, los primeros de Cuba. ¡Skol!
(Esta reseña fue publicada originalmente en Opía Magazine, y rescatada luego del reinicio de esa web)