Metal cubano: un tributo a Sectarium
Junior Hernández Castro 
En 1994, una época en que bandas como Benediction, Entombed o Gorefest lanzaban algunos de sus principales trabajos, Sectarium, de Villa Clara, publicó el demo God’s Wrath. A la postre, aquel fonograma grabado a pulso se convertiría en una obra de culto para el metal extremo de Cuba; en tanto el grupo trascendería hasta nuestros tiempos como leyenda del underground nacional.
Precisamente por esa razón, dos décadas y media después, siete agrupaciones del país se unen para recordar su obra con el álbum The Wrath of God. Para más señas, el guitarrista Abel Oliva, integrante original de Sectarium, comparte algunos pasajes sobre la historia del mítico grupo y comenta los detalles del disco-homenaje y el futuro próximo.
«En los años noventa, a partir del primer Festival Ciudad Metal (1990) hubo una eclosión de bandas en la provincia de Villa Clara, en el centro del país, con más fuerte presencia en las localidades de Santa Clara, Placetas y Caibarién», recuerda Abel, y repasa algunos de los nombres más destacados de la época: «Alto Mando, Cronos, Infestor, Necrófago, Nekrobiosis, Alien, Vórtice, entre muchos otros».
Sectarium, enmarcada en una sonoridad death-doom, tuvo la suerte de que el demo God’s Wrath fuese reseñado en varios fanzines internacionales, y distribuido en Europa y Latinoamérica. Mientras tanto, el trío de Abel Oliva, Duviel Quiroz (batería) y Franto Paul Hernández (bajo-voz), mantuvo un intercambio constante con las bandas noveles de la escena nacional y una participación regular en eventos, al menos, hasta el asesinato del cantante en 1997. Después de la tragedia, Sectarium entró en una larga pausa, aun cuando en 1999 publicó el demo Larvae como homenaje póstumo a Franto.
Tras muchos años de letargo, y pese a la salida de Abel rumbo a Suiza, una nueva etapa ha comenzado. Según el guitarrista, la inclusión de un track inédito en el compilatorio nacional The Cuban Wall of Death, y los deseos de relanzar los demos de los noventa, encendieron la llama del Sectarium.
Sobre The Wrath of God, comenta que la idea de hacer el compilatorio surgió tras recibir propuestas cubanas para versionar temas del demo God’s Wrath. La banda Skjult, una de las presentes en el lanzamiento, ya había incluido un homenaje al grupo villaclareño en el MCD The Voyage (2020), así que la ruta estaba trazada.
Para el resto del compilado, el guitarrista de Sectarium designó a Juan Carlos Torrente, vocalista de Combat Noise, como productor ejecutivo del tributo: «Él se ocupó de seleccionar las bandas y proponerles qué tema versionar. Su amistad y su conocimiento de la escena extrema cubana me decidieron a confiar en su criterio».
Desde la mayor de Las Antillas, cada grupo grabó y masterizó por su cuenta en estudios de La Habana, Camagüey y Holguín. Acerca de la posibilidad de una remasterización conjunta, Abel comenta que fue un pensamiento inicial, pero finalmente decidió dejar los tracks como los enviaron, «y que cada tema tuviera su propio feeling».
Así, «The Breath / Into the Carrion» corrió a cargo de From the Graves, «Furies», por cuenta de Mephisto, y «Souls in Pain», en la interpretación de Helgrind. «Abominable Cult», por otro lado, reapareció en manos de Skjult; «God’s Wrath» fue revisitado por Dying Forest; y «Perpetual Ice» e «In to the Storm» fueron homenajeadas por Butcher y Sex by Manipulation, respectivamente.
En esta primera edición, The Wrath of God fue lanzada bajo el sello del propio guitarrista, OLIproductions, con el que edita también sus proyectos personales: Naurea y Godes Yrre. Facturadas en Estados Unidos, las 100 copias del disco tributo, en formato digipak, cuentan con la distribución de Scriptorium Magazine para América y de SECTARIUM para Europa.
«En su variante digital, saldrá el 9 de enero de 2022 en Bandcamp y a mediados del mismo año en Spotify, YouTube Music, Apple Music, Deezer y otras conocidas plataformas de streaming», confirma Abel, y enseguida adelanta: «Una segunda edición del material se está preparando por un conocido sello, pero aún no puedo dar más datos».
¿Y habrá más de Sectarium pronto?, cabría preguntarse. «¡Eso es 100 por ciento seguro!», responde el guitarrista. «Hay un nuevo álbum que está casi terminado, y tengo planes de un segundo disco con invitados de otras bandas de metal extremo. ¡El demonio se ha despertado y no volverá a dormir en un buen tiempo!».
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